Ella es bastante sociable; él, muy tímido. Como a muchas chicas, le gusta salir a divertirse. Por eso lo invita a las reuniones de sus amigos. Sin embargo, a él no le atraen mucho las fiestas y, cuando va, parece que estuviera en otra dimensión.
No solo tienen diferentes gustos; también, una visión de la vida y objetivos que no siempre coinciden. Pero se quieren. ¿Su relación tiene futuro? Sí. Su romance puede ser duradero si las diferencias terminan siendo complementarias en el mismo.
Para el psicólogo del Centro Psicoterapéutico del Perú, Estuardo Yacolca, ambos caracteres pueden ser compatibles si son tolerantes para aceptar y respetar las diferencias del otro.
Además, explica, hay casos en que la atracción comienza por la admiración de características que uno no posee. “Los enamorados podrán aprender mutuamente. Una persona muy social podrá enseñar al tímido a relacionarse con los demás. Y el segundo podrá demostrarle a su pareja el valor de la soledad”, señala.
No obstante, hay un factor que siempre pondrá en duda la relación: la autoestima. Si las diferencias son tan marcadas que van en contra de la integridad de una de las personas, el romance no durará mucho. “Aunque un miembro de la pareja tenga baja autoestima y termine por tolerar todo del otro, la relación no tendrá futuro”, afirma.
EN EL LIMBO. Cuando el romance está en peligro, la pareja debe tener disposición de discutir su situación. “Es importante hablar. Sin embargo, no se debe comunicar, en sentido acusatorio, las cosas que a uno le afectan”, recomienda el especialista.
Según el experto, lo peor que se puede hacer es callar porque, en algún momento, uno “explotará’ y la relación correrá el riesgo de llegar a su fin.
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